miércoles, 6 de octubre de 2010

Ni el karaoke está a salvo


Acabo de leer la siguiente información: 'Desafinar al cantar el himno nacional de Filipinas puede costar penas de cárcel'. Sí, helado también me he quedado yo. El congreso nacional filipino 'prevé condenas de hasta dos años de cárcel y multas de más de 2.000 dólares para quienes desafinen al cantar el himno nacional. El himno debería ser cantado con el tempo propio de una marcha, del orden de 100 a 120 metrónomos, con compases de cuatro cuartos y dos cuartos'. Vaya, vaya.

¿Y cómo pretenden que un ciudadano con pocas dotes musicales muestre su amor patriótico (ejem, jejeje)? ¿Realizarán una especie de Operación Triunfo para los posibles intérpretes? ¿El karaoke será como un examen para aquellos que vayan a deleitar el oído con el himno nacional?

Si adaptamos esta tontería de regla al himno español, las cárceles de nuestro país se iban a quedar pequeñas. No sólo porque no existe letra alguna (no quiero ni pensar en aquellos que se inventan letras jocosas, directos al paredón), sino porque viendo por televisón la gente que lo canta (véase como ejemplo un partido de la selección donde se enfoca directamente a los aficionados con el lalala en la boca) el nivel de canto en España es bastante bajo (seamos realistas). Sería buena manera de salir de la crisis. 2.000 euros por (pongamos) 30 millones de españoles que desafinamos.... hagan las cuentas.

martes, 5 de octubre de 2010

Yo también les pegaría... pero una hostia (con perdón)


Hoy ha saltado a la palestra informativa otro caso de padres que parece que en vez de tener un hijo que cuidar poseen un objeto sobre el cual focalizar sus desencantos y frustraciones. El caso de hoy (llamativo, pero ya no tan sorprendente) es el de dos padres muy jóvenes de Estados Unidos (18 y 19 años) que se han dedicado a pegar a su hijo a la pared con cinta aislante y pegamento en los pies. A la criatura de 22 meses la despertaron de su necesario sueño después de una noche loca con la presencia del alcohol como invitado de lujo (la noticia no dice si el niño estaba solo en casa).

No contento con esto ( como hacen millones de adolescentes en el mundo), los desaprensivos progenitores colgaron las fotografías de su degenerada acción en una conocida red social. Ahora, la justicia ha actuado. De momento le han quitado a un hijo que no merecen. Espero que la condena sea ejemplar. A esa edad no se está preparado para ser padre y asumir tanta responsabilidad. No obstante, si no se han tomado las medidas oportunas para evitarlo, uno debe ser lo más maduro posible para aceptar que la vida de una persona (que no puede defenderse) está en su mano. Para más inri, el 'padre' tenía, además, antecedentes por robo y guardaba un arma en su casa (eso sí, también robada). Vaya ejemplos!!

A diario veo padres que no se merecen recibir dicho calificativo (para no desprestigiarlo). Desde madres que llevan a su hijo de pocos meses en brazos mientras van fumando sin miramientos de hacia dónde va el humo. A otros tantos que viajan en coche con el hijo en el asiento del copiloto en las piernas de su madre. A otros (mucho peores) que llevan de 'paquete' a su hijo de menos de cinco años en la moto... Y así podía seguir un buen rato.

Para todos ellos, exigiría una revisión cerebral para poder implantarles una idea sencilla: un niño es algo inocente e indefenso. En él hay que inculcar unos valores y conocimientos que hagan de ese futuro hombe o mujer una persona de bien.