Examinando la lista Forbes (sí, esa que anualmente a más de uno le pone los dientes largos) he vuelto a ver las 'burradas' de dinero que cuatro empresarios tienen, y lo poco (o nada) que millones de personas poseen en el mundo.
No paro de escuchar mensajes de las ONG's, de las asociaciones de caridad.... para que nosotros, ciudadanos de a pie, demos algo de lo que nos sobra (que no es mucho por la crisis) para tratar de ayudar a nuestros congéneres más desvalidos. Pero, estos multimillonarios (el ganador este año acumula para sí y su familia 53.500 millones de dólares) no tienen esa conciencia social o no les llega el mensaje adecuado.
Viendo cómo está el mundo podrían hacer un esfuerzo mayor. Está claro que todos ellos aportan algo de caridad, pero habrá que ver que porcentaje de esa riqueza está destinada para los menos favorecidos. Y en el caso de este año, el mexicano Carlos Slim tendría que mirar, únicamente, de puertas hacia adentro para ver cómo está su país (el 49,3% de la población de México está inmersa en la pobreza) y como una inyección económica podría ayudar de forma notable . Más si cabe, porque este hombre ha forjado su fortuna gracias a la gente (su imperio ha crecido gracias a las telecomunicaciones).
Sé que tiene mucha familia -6 hijos-, negocios que mantener, realiza aportaciones solidarias, que es austero y un 'rico a la vieja usanza' (como se afirma en numerosos reportajes que he leído), así que no creo que le importe dar los 500 millones de dólares que le han separado del segundo clasificado de la lista Forbes: Bill Gates (otro que tampoco lleva nunca dinero encima).
